¡Hola gente! Pues hoy me toca a mí pasar por aquí a escribir una entrada y toca sobre películas. En este caso os traigo una de las últimas que fui a ver al cine, y es Un monstruo viene a verme.

Esta película trata sobre Conor, un niño de 13 años, que no está viviendo una buena situación en su vida: sus padres se separaron, su madre padece de una grave enfermedad y sufre acoso escolar. Con todo esto él crea su propio mundo de fantasía para poder evadirse del mundo y de la realidad, y así superar sus miedos.

Tras la ventana de su habitación, Conor puede observar un tejo. Una noche este ábrol cobra vida y se acerca hasta la ventana, pero no es aterrador, no quiere hacerle daño a Conor. El árbol se le aparece por la noche al protagonista para contarle historias con una moraleja final, y así, poco a poco, descubrir la verdad y ayudar a Conor a superar sus miedos, pero ¿será capaz nuestro protagonista de asumir la realidad de su vida?

Al principio esta película no me llamaba la atención, pero en cuanto vi el tráiler supe que tenía que ir al cine, y qué buena elección fue esa. Esta filmografía está llena de sentimientos, de enseñanzas. Es una película que no tienes que verla solo con los ojos abiertos, porque hasta puedes cerrarlos para dejarte llevar por lo que está pasando, para poder escuchar aquello que te quieren transmitir, porque expresa tanto que es increíble. Todas las historias que le cuenta el tojo, su vida, cómo se siente él y cómo se sienten los que están alrededor también, está cargado todo en un mismo sentido. Ver cómo Conor afronta sus problemas y que podamos adentrarnos en su pensamiento es algo que no se puede describir.

Esta obra está llena de realidad, pero también tiene su ''fantasía'', ese mundo al que vamos las personas cuando no tenemos ni idea de adónde más recurrir, cuando tenemos tantas ganas de escapar que nos evadimos de ella, y ver cómo se mezclan estas dos cosas, que pueden ser como dos mundos opuestos, y que aquí parece tan real. Sobre todo todo ese crecimiento de madurez que tiene el protagonista a lo largo de la historia. 

Y es que no es solo eso, es mucho más, te hace pensar, llorar, soñar... Es como si tú mismo pasaras a ser el protagonista tras la pantalla, es impresionante.

Así que ya sabéis, si os gusta que os hagan pensar y reflexionar no os podéis perder esta película, porque es una gran obra de arte.